martes, 11 de diciembre de 2018

ODIAR AL HOMBRE, NO ES LA SOLUCIÓN A TUS MALES DE AMOR NI TE LIBRARÁ DE RELACIONES AMOROSAS NEFASTAS

Si crees que odiando a los hombres o a uno en particular, tu autoestima o tu dignidad subirán su cotización, estás muy pero que muy equivocada.

Nunca el odio fue la solución a ninguno de los males de la Humanidad, más bien, al contrario fomentaron males, guerras y divisiones de todo tipo además de envenenar el alma y emponzoñar el corazón.

Hace un tiempo, colaboré con Mirian Díaz Aroca en su proyecto 'ELÍGETE', en contra de la violencia de género y a favor de la mujer (así me lo tomé yo). Ella expuso casos tanto de mujeres (principalmente) como de hombres (pocos, sólo algunos pero si representativos), de violencia contra el otro dentro de la pareja.

El perfil del maltratador o maltratadora, en mi opinión, difiere poco: en ambos géneros, cuando de maltrato se trata, abunda la maldad nacida de la ausencia y negación de responsabilidad sobre la vida propia y más, en concreto, sobre los actos cuyo desenlace no nos complace. Todo ello deriva en la proyección del odio sobre el otro para, de este modo, al azuzarle con el látigo del odio convertirlo en objeto de maltrato y expiración de los males. Nada más lejos de la realidad.
Ambos, maltratador y maltratadora, hallan oportunidad cuando la otra parte por miedo a perder a los hijos, perder el amor o... acaban cediendo y perdiendo la dignidad. No plantarle cara al maltratador o maltratadora es el comienzo del desastre.

NUNCA reniegues de tu dignidad, de tu amor propio.

NUNCA dejes de poner los límites.

NUNCA dejes de hacer la prueba del algodón al inicio de la relación: la persona maltratadora da muchas muestras desde el inicio, aprende a reconocerlas, estate atenta. 

Otra de las cosas que me llamó poderosamente la atención es la propensión que muestran las mujeres maltratadas a las que he escuchado su relato, en CULPAR al otro y/o a disculparse a sí mismas (se exoneran de toda responsabilidad), en nombre del amor, es decir, la 'culpa' la tuvo el que estuvieran enamoradas. Enamoradas, no. Alucinadas, si. Contaminadas de su propia irresponsabilidad.
No es lo mismo tener relaciones amorosas 15 0 18 años que 30 o más.
¿Por qué?
Porque a los 15 o a los 18 aún no nos hemos dado suficientes coscorrones vitales, aún estamos en estado 'naïf'.
Eso sí, las madres, las abuelas, las otras mujeres, deberían esforzarse en enseñarlas que hay lobos muy malos, nefastos, maltratadores, hijos de la grandísima... que habitan los bosques de las relaciones amorosas.
Muchas películas y libros erótico festivos han hecho mucho mal, pues les han hecho creer (con el consentimiento de ellas, claro), que si hay buen sexo y jadean juntos, la relación es maravillosa y ya no hace falta nada más.
Identificar al maltratador es más fácil de lo que parece. Al igual que identificar a la maltratadora.

Vamos por partes.
MALTRATADOR/SEÑALES DE PRE-AVISO:

- Piensa por ella, esto es, no le pregunta, en su lugar, decide qué y cómo debe ser la relación. Por ejemplo, le dice 'cuando vivamos juntos...' Pero, no han aclarado aún en que tipo de relación están.
- Muestra celos.(Empero, ser celoso no es una muestra de amor).
- Se muestra controlador: llama mucho, envía muchos mensajes.
- No cumple la palabra dada.
- Da prioridad a quedar con los amigos en lugar de con ella, aún habiendo quedado con ella, se olvida o hace cambio de planes
- Le da mucha importancia al sexo pero no hay diálogo.
- No se habla a cerca de los valores, el cómo quiere que sea una relación.
- Hace chistes misóginos, machistas, ofensivos...
- No considera que la mujer tenga los mismos derechos (esto se sabe escuchándole hablar).
- Le da ordenes
- Le echa las culpas de todo.
- La riñe si se equivoca, no muestra ninguna empatía con ella.
- Ella lo es todo para él: mucha palabra pero actos que no secundan
- Marca las pautas de la relación
- No le pregunta a ella qué quiere
- Pasa de cómo ella o él, se siente
- Le critica su forma de vestir, o se mete con su cuerpo o su peso... La denigra sutil o no tan sutilmente
- Usa el 'vosotras' para acusar de algo a su pareja en lugar de referirse a ella
- Usa el 'nosotros' para emitir opiniones
- No tolera o lleva muy mal la discrepancia
- Hace de la mujer, su pareja, el centro de su vida, todo gira en torno a ella, trata de complacerla en todo...
- La toma y la deja, esto es, procede como si la otra persona fuese un coche, un objeto con un mando 'ON y OFF'.
- No hay reciprocidad en la relación, en lo relativo a lo 'bueno'.



MALTRATADORA/Señales de pre-aviso:
-Maricaprichines: tiene que salirse siempre con la suya
- Cuando está enfadada o quiere manipular da o no da sexo.
- Echa las culpas de sus males a los padres, al mundo, a Dios... al chachachá.
- Se hace la tonta, la inocente
- Se hace la víctima de todo
- Su vida cobra sentido con la aparición de un hombre en su vida
- Odia o habla mal de otras mujeres (por regla general, inteligentes y que destacan).
- No hace autoreflexión ni asume responsabilidades
- Se echa a llorar en cuanto le dicen algo que no le conviene
- En lugar de argumentar una discrepancia, insulta o trata de ningunear a la otra persona
- Deja de hablarle a alguien cuando no le gusta algo que le haya dicho, en lugar de plantarle los límitees
- Se escuda en el amor para justificarlo todo
- Es una rescatadora
- Va de hechicera novata o 'pseudo terapeuta'
- Quiere cambiarle algo... al otro porque ella, como es mujer, sabe más.
- Usa el 'nosotras las mujeres' en lugar de el 'yo' para emitir opiniones.
- Es desagradecida




No todo lo que parece oro, lo es.
A las personas se nos va conociendo conforme avanza el camino y se dan múltiples situaciones.
Cuando alguien en consulta se me queja mucho y acusa a los demás de ser la fuente de sus males, suelo colocar, como dicen los americanos, un gran 'question mark', o sea, un INTERROGANTE. 

Y, sobre todo, ese 'estaba enamorada', o 'nadie en mi entorno me ayudó'... No apuntan en buena dirección.

Aún no he escuchado a ninguna (no digo que no las haya, simplemente no he dado con ninguna), que su discurso lo enfoque desde el 'yo contribuí de esta y de la otra manera a meterme en una relación nefasta de maltrato. Yo lo consentí por acción y omisión de esta y de esta otra manera... hasta que un día, pasó tal cosa y decidí que se había acabado el estar en esa mala relación."

HASTA LA FECHA, no he escuchado algo así.
Lamentablemente, suelo escuchar: 'Yo aguanté por mis hijos...', 'Él no me dejaba hacer lo que quería', 'No podía hacer nada'...
Y, lo que es peor, a su alrededor, asociaciones de mujeres creadas para ayudarlas a salir del maltrato, no les enseñan que tienen derechos y responsabilidades, sólo les dicen que tienen derechos y que ellos, los hombres, son muy malos.

Si yo, pongamos por caso, necesito dinero o ando escasa de dinero, y en lugar de reconocer cómo he contribuido a esa situación y asumir la responsabilidad, me dedico a echar pestes del dinero o del banco, ¿voy a solucionar de esa manera mi estado de escasez de dinero? Seguro que no. Empero, muchas, proceden así ya sea trate de dinero o de hombres.













No hay comentarios:

Publicar un comentario