
La reina que dio calabazas (bolsillo)
Para poder amar de forma incondicional hay que demostrar ser una reina con la corona bien puesta, valiente, honesta y emocionalmente independiente. Las reinas tienen que estar orgullosas de lucir sus coronas, de hacerlas brillar con su luz interior y nunca, en ningún caso, desprenderse de ellas, aunque para ello tengan que dejar atrás a determinados caballeros enfundados en una armadura que con el tiempo se ha ido oxidando cada vez más. Esta gran fábula sobre la vida y los sentimientos, concebida a modo de brillante metáfora por Rosetta Forner, nos recuerda que jamás hay que perder ni una pizca de autoestima y nos muestra cómo hay que superar el pasado y tener fe en las posibilidades que brinda el futuro para encontrar o conservar el amor verdadero y comprender la plenitud de su significado.
PONTE LA CORONA Y NO TE LA QUITES NI PARA DORMIR.
Este libro cumple 13 años el próximo mes de abril.
La primera edición se vendió en menos de un mes y sin publicidad, sólo por el 'boca-oreja' = recomendación.
LA REINA... es un libro que ha salvado a muchas mujeres (e incluso a hombres), de una mala relación de pareja. En cambio, ha habido otras mujeres a quienes sus amigas y terapeutas les recomendaron este libro, y quisieron tirarlo a la hoguera: al no soportar verse reflejadas en el arquetipo de 'DAMISELAS DE DIADEMA FLOJA'.
* No todas las mujeres quieren asumir la responsabilidad de ser REINAS.
* Ponerse la corona y no quitársela ni para dormir, es tarea ardua. Pero también es el umbral que, al traspasarlo, se pasa a la FELICIDAD que hay en toda autoestima & dignidad recuperadas.
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Un poco del libro para que lo conozcas:
Segunda parte:
LA REALIDAD
¿De verdad… creíste que el
caballero volvió?
La realidad, a
veces, es mucho mejor de lo que nos atrevemos a soñar. Sin embargo, primero
tenemos que franquear el umbral del miedo a la desilusión, lo cual nos
permitirá volar libres nuestro destino sin mirar hacia atrás, confiando solamente
en el instinto mágico y en la certeza del alma. De este modo, un día de sublime
amanecer, seremos capaces de disfrutar de esa realidad soñada.
Soñar los
sueños del alma.
Soñar que el
vuelo en libertad es construir nuestro destino.
Soñar es darle
voz al alma y permitirle el canto a la vida.
Capítulo #1.
En espera de que suceda un milagro
¿De verdad
esperabas que el caballero volviese?
¿Soñabas con
que él se recuperaría de su incertidumbre vital y se lanzaría a resolver el
acertijo de sus sentimientos y emociones en un breve espacio de tiempo?
Estas cosas
sólo suceden en las novelas rosa y libros digamos fomentadores de insensateces,
o en la mente de gente soñadora, crédula y ajena a la realidad, o en las
máquinas de escribir de los guionistas de Hollywood, los cuales se empeñan en
pintar la realidad de un imposible color rosa. Un ser humano no resuelve su
acertijo vital en breves semanas. A veces, no suele resolverlo ni en toda una
vida. Por consiguiente, aunque a todo ser humano enamorado de otro, le gustaría
que la persona objeto de su amor regresase a sus brazos, enmendase la plana y
se ajustase el corazón…
… en la
realidad real, eso no suele ocurrir.
El milagro acontece
cuando la persona, objeto de nuestro amor -esa que a su vez nos niega su
sentimiento-, se aleja para no volver nunca jamás a nuestra vida.
“¿Milagro? ¿Dónde
está el milagro si él o ella nunca vuelve a mi?” A buen seguro que estarás
pensando.
Afortunadamente
no siempre nuestros deseos se hacen realidad, porque de hacerlo no le dejarían
espacio a los auténticos, a los que de verdad aguardan que nuestro corazón les
abra la puerta.
“¿Estás
segura?” Imagino que estarás cuestionándome.
Ciertamente, lo
estoy.
Tan sólo has de
observar el camino vital que has recorrido, y con toda seguridad hallarás, como
mínimo, un ejemplo de algo que deseabas y que no sucedió. Y, esa fue tu gran
suerte: que nunca aconteciera, que nunca te fuese concedido el deseo. De haber
sucedido lo contrario, tu verdadero sueño nunca se hubiese hecho realidad.
Generalmente, un “no” alberga la semilla del “sí”.
Recuérdalo.
Realidad
es, simplemente, el cómo decidimos vivir lo qué nos acontece. La experiencia de
la realidad es lo que guardamos en nuestas alforjas, y no otra cosa. Mejor
dicho, lo qué ahí hay guardado es el cómo decidimos vivir o experimentar eso
llamado realidad (lo qué nos aconteció.)
La realidad:
a) La reina
inició una nueva vida, aunque sería mejor decir que simplemente prosiguió con
la que ya tenía.
b) El caballero
de armadura oxidada no tuvo valor para enfrentar sus sentimientos por la reina.
Y, lo más que acertó a hacer fue largarse a vivir a otro país -tal y como ella
había predicho-, tratando de huir de sus miedos. En su ignorancia de armadura
oxidada creyó que con la distancia de los kilómetros, el despiste de otro
idioma, la comida y gentes de otras vivencias lograría conjurar sus
sentimientos. Nunca más la llamó. Tan sólo le envió un email de despedida. Ahora
bien, en su despropósito de caballero de armadura oxidada, le dijo a la reina
que si ella decidía llamarle, él estaría encantado de volver a verla… ¡Hay que
ser muy memo para proponer algo así a una reina! O, para osar decírselo a
la corona. Evidentemente, cuando la
reina leyó el email, sólo pudo sonreír, y darle a la tecla de “borrar.” ¿Qué
otra cosa, sino, era apropiado y sensato hacer? Semejantes declaraciones,
explicaciones y propuestas dignas de un adolescente, no alcanzaban, ni por
casualidad, al rango de “dignas de respuesta” por parte de la corona.
Era ya hora de
vivir, de abrirle la puerta al destino. La reina sonrió ante la inmediatez del
sueño y la felicidad que proporciona el saber que uno es sabio en su corazón.
Por consiguiente, ella acertó al no mirar atrás ni quedarse cual Penélope
alelada en la estación del tiempo de nunca-jamás esperando a un caballero que
distaba muchas vidas de convertirse aún en rey.
A una reina el
destino siempre le sonríe…
Será porque las
reinas siempre le sonríen a la Vida cada mañana.
El milagro que
la reina esperaba que sucediese en nada tenía que ver con que el caballero la
volviese a llamar, como así se lo comentó a otra amiga reina. Nadie en su sano
juicio puede albergar la peregrina y pueril idea de que un caballero con
armadura demasiado oxidada resolverá su acertijo interno en breves semanas…
Sólo a una damisela de diadema floja se le podría ocurrir esperar al caballero,
o llamarle para rogarle amor y despiste de angustia. Era, a ese tipo de
comportamientos, a los que el caballero estaba acostumbrado. Unos ciertamente
demoledores de la dignidad y desestabilizadores de la corona. Pero ya se sabe,
a una reina se le puede mover la corona, pero caer… ¡nunca! Caérsele la corona
a una reina significa, entre otras cosas, olvidar que cuando uno todavía no ha
madurado sentimientos y forjado carácter, a lo largo de experiencias vitales y
sinsabores existenciales varios, muy presumiblemente no podrá hacer dicho proceso
en un breve tiempo terrestre… No es imposible, pero tampoco es muy probable. No
se despejan dudas existenciales, ni entenderse pueden emociones del corazón de
la noche a la mañana… Y, es que esto, la reina lo sabía por experiencia propia…
A ella le hubiese gustado que el caballero hubiese sido obsequiado por los
dioses con el milagro de la iluminación existencial, pero… siendo tan realista,
tan juiciosa y plena de sentido común como era, sabía que los dioses la
obsequiarían con algún regalo inesperado que en nada tendría que ver con este.
Y, es que a decir verdad, lo mejor que le podía suceder al caballero de
armadura demasiado oxidada y huidizo miedo a confrontar su destino es que, por
esta vez, los dioses le ignorasen y no le bendijesen con su luz.
¿Por qué?CÓMO NACIÓ LA IDEA DEL LIBRO
El libro se inspiró en la figura de la esposa del caballero en la fábula 'El caballero de la armadura oxidada', Julieta, que, decide empinar el codo (disfuncionalizarse), para poder soportar el desaguisado emocional del marido. Eso se me antojó de 'damiselas', o sea, sólo una perdedora se hace daño a sí misma (refugiarse en el alcohol, en la comida, en las relaciones vacías, en el sexo de resaca imposible de olvidar al despertar...). Al igual que decidí que una mujer REINA, da calabazas a un tipo al que se le ha oxidado la armadura, en lugar de proceder como Julieta (empinar el codo, ir de relación en relación vacía de sentido...). Por consiguiente, decidí escribir un libro para animar a las mujeres a ser REINAS, esto es, a ponerse la corona y coger la riendas emocionales de su vida incluyendo el divorciarse si ello fuese necesario del marido, o despidiéndose el trabajo (a veces, el caballero de armadura oxidada que hay en la vida de una mujer, es el jefe o la jefa).
El título le pareció, en un principio, muy largo a un amigo mío que es editor. No obstante, lo consultó con otras personas, y me llamó para decidirme que 'era un título que gustaba mucho'.
Mi entonces editora en RBA se lo pasó genial leyéndolo. Y, yo, la autora, me lo leí de una sentada cuando me llegaron los ejemplares de la primera edición.
Miles de mujeres, y hombres, han leído el libro desde su publicación en 2004. Les ha salvado de una mala, nefasta, horrible, insulsa, decepcionante... relación de pareja sentimental, sobre todo, y/o profesional.
EL PRÓLOGO
Es de JAVIER SIERRA, un exitoso autor conocido en todo el mundo mundial.
La anécdota detrás del prólogo: estaba yo pidiéndole a Javier que me hiciese el honor de escribir el prólogo, cuando sonó mi teléfono Era mi editora en RBA para decirme que mi libro 'CUENTOS DE HADAS PARA APRENDER A VIVIR' (el 1º que me publicó RBA) había vendido la primera edición en menos de dos meses.Tengo que explicar que lo que lo hacía excepcional es que lo habían sacado a la venta el 10 de Julio 2003.
¿Qué pasa con el mes de julio?
En el mundo editorial sacar a la venta un libro en el mes de julio es considerado como 'darle el beso de la muerte', o sea, condenarlo al fracaso...
Esa llamada fue el 'toque mágico'... Y, Javier accedió a escribir el prólogo..
El resto es historia.
La historia de una mujer que se casó enamorada. Y, cuando su marido se convirtió en caballero de armadura oxidada, ella, en vez de volverse alcohólica o echarse amante para olvidarse de sí misma y evitar afrontar su oportunidad de coger las riendas emocionales de su vida, le dejó. Porque toda razón puede ser divorciada...
NO TE QUITES LA CORONA PARA PARECER MENOS ALTA QUE TU CABALLERO DE ARMADURA OXIDADA.
Por si quieres que te enseñe a ponerte la corona: info@rosettaforner.com
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ResponderEliminarEste libro es el mejor antídoto para salir y no (volver a) entrar en relaciones disfuncionales, de maltrato psicológico, malsanas, emponzoña autoestima, tóxicas para el alma... Ha sido altamente recomendado, desde su publicación, por asociaciones de mujeres maltratadas, psicólogos, y las mujeres con sentido común. Mi lema PONTE LA CORONA Y NO TE LA QUITES PARA PARECER MENOS ALTA QUE TU CABALLERO DE ARMADURA OXIDADA. Si estás harta de besar sapos que nunca se convierten en príncipes, o de permitir que el color de tus días lo decida un hombre... LEE ESTE LIBRO ANTES DE QUE SEA DEMASIADO TARDE. Besos hadados. Rosetta
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